jueves, 28 de febrero de 2019


“PEPITA SANDWICH HOMENAJE A MUJERES HISTÓRICAS QUE FUERON INVISIBILIZADAS”

La ilustradora lanzó su libro Las mujeres mueven montañas (Lumen). Allí, entre viñetas, cuenta la historia de científicas y exploradoras, pero, sobre todo, inspiradoras.

Mujeres talentosas, valientes, empoderadas, adelantadas a su tiempo, que hicieron historia. A todas ellas incluye Josefina Guarracino, más conocida como Pepita Sandwich, en “Las mujeres mueven montañas” (Lumen). Por sus páginas pasan, entre otras, Eva Dickson, la primera mujer en cruzar el Sahara en auto; Valentina Tereshkova, la primera que voló al espacio, y Mary Anning, conocida por sus numerosos hallazgos del período jurásico. La autora cuenta entre viñetas la vida de exploradoras, científicas y escaladoras, que fueron, ante todo, inspiradoras para las siguientes generaciones de mujeres.


“Cuando empecé a pensar el libro leí mucho sobre más de 50 mujeres exploradoras. Finalmente elegí contar las historias que más me habían llamado la atención, ya sea por la magnitud de la hazaña o la empatía con las mujeres. Intenté elegir historias que fueran diversas entre sí, para que cualquier mujer se vea representada. Quise que fueran de diferentes países, razas, épocas, clases sociales y profesiones. Los obstáculos sociales por los que tuvieron que atravesar fueron diferentes, pero hay un denominador común que es el de transgredir alguno de sus mandatos”, sostuvo Josefina a Crece Mujer.

Guarracino indagó sobre mujeres que hicieron sus propios viajes, dieron la vuelta al mundo, atravesaron tierras desconocidas y hasta tuvieron que mentir sobre su género y, según aseguró, todas esas vidas la conmovieron. “Particularmente me encanta la historia de Valentina Tereshkova, la primera mujer en el espacio, porque tengo una fascinación especial con el cosmos y me encanta que las mujeres lleguen a las estrellas. También me encanta la pasión de Rosaly Lopes por los volcanes y cómo Junko Tabei transgredió la cultura japonesa para llegar a los siete picos del mundo”, afirmó.


La obra de Pepita Sandwich tiene una particularidad y ese sea quizás uno de sus mayores méritos: puede disfrutarla tanto niñas como adultas (los varones no quedan excluidos, claro está). Según ella, su “intención es que lo lean mujeres de cualquier edad y se puedan sentir inspiradas. Nunca es demasiado tarde o temprano para cambiar de rumbo, como la historia de Bárbara Hillary, que decidió llegar a los dos polos a los 67 años; o Mary Anning, que descubrió el primer esqueleto de un ictiosiaurio a los 12 años”.

Si bien el libro se basa en biografías que datan de varios años atrás, la desigualdad de género en el ámbito laboral sigue siendo una cuenta pendiente a nivel global. Para Josefina, “las luchas de las mujeres en el mundo hoy en día ayudan a que la sociedad en general se cuestione el rol de la mujer y ha abierto oportunidades en espacios que fueron tradicionalmente ocupados por hombres. Pero todavía queda mucho por hacer en cuanto a la disparidad de género, la brecha salarial, el trabajo no remunerado y la maternidad. La tendencia es alentadora pero todavía nos queda un camino por recorrer”.

martes, 26 de febrero de 2019


“IRONÍA FEMINISTA: CACAS MACHISTAS, EL HUMOR EN STOP MOTION QUE YA ES VIRAL”

Se trata de una serie de capítulos de la argentina radicada en España Lula Gómez. En distintos episodios se refiere al acoso callejero y al aborto, entre otros temas.

Humor feminista de la mano de la más alta ironía. Esa es la propuesta de Lula Gómez, realizadora audiovisual y animadora de stop motion a cargo de “Eres una Caca”, una serie de capítulos que critican y se burlan del patriarcado y las tradiciones machistas.

El aborto o el caso de “la Manada” en España forman parte de las temáticas que eligió esta creativa que ya cuenta en Instagram con más de 130 mil seguidores. Cada capítulo de Lula, esta argentina radicada en España, se convierte en un fenómeno viral.


“‘Eres una caca’ surge de la necesidad de compartir, de alguna manera, todo lo que había aprendido y sigo aprendiendo sobre feminismo. Combiné mi profesión, la animación stop motion, con esas ganas que nos dan a las feministas de contagiar el conocimiento y el entusiasmo”, dijo Gómez a Crece Mujer.

Como argentina viviendo en España, Lula ya convivió con la cultura patriarcal en dos continentes distintos, pero con los mismos conceptos machistas profundamente arraigados. “Hace muchos años que vivo en Barcelona y no quisiera ser inexacta. Pero desde aquí vemos con mucha alegría las multitudinarias marchas de las compañeras en Argentina. Nuestra lucha es la misma, la explotación sexual de la mujer se repite en todos lados y levantarnos contra el sistema patriarcal, prostitucional y esclavista de la mujer nos une, estemos donde estemos”, sostuvo.

“Todas las mujeres que conoces vienen siendo agredidas violentamente en cualquier espacio público desde los diez, once o doce años. Guárdate tus piropos”, escribió la feminista en el capítulo contra el acoso callejero.


En aquel que le dedicó a la interrupción voluntaria del embarazo, dijo: “En los países en los que el aborto es legal, seguro, y gratuito, porque se lo trata como lo que es (una cuestión de sanidad pública y no un asunto a discutir desde la moral de tal o cual religión), no hay hordas de mujeres haciendo largas colas para abortar en medio de ritos satánicos, no hay aquelarres donde se toman elixires de placenta y canapés de fetos, ni siquiera hay más abortos que en los países donde ridículamente aún es ilegal. En los países donde es legal el aborto no hay nada más que una cosa: mujeres que cuando quieren abortar no mueren, aunque sean pobres y no tengan cómo acceder a un aborto en una clínica privada. Si no estás de acuerdo con el aborto, no abortes. No es tan difícil”.

Pero su "caca" favorita está en el episodio número tres: “En realidad todas son odiosas, pero debo confesar que la del tercer capítulo, el amigo violentado, el que se siente agredido porque su amiga feminista lo expone o lo cuestiona, me encanta. De ese sí que todas conocemos a uno, ¿verdad?”, mencionó. “Cuántas veces has escuchado a amigos varones que se quejan de que eres agresiva por ser feminista, pero jamás los has escuchado quejarse por las agresiones brutales que sufrimos las mujeres a diario”, reflexionó.


Por último, Lula destacó la impresionante respuesta del público ante su obra. “Yo esperaba que luego de subir el primer video me cerraran la cuenta por denuncias de ofendiditos, pero eso nunca sucedió, Lo compartieron montones de mujeres en todo el mundo, entre las que estaban mis propias ídolas: mujeres artistas que admiro mucho me ayudaron sin conocerme y me aconsejaron”, contó. Y concluyó: “Una prueba más de que aquello que nos han enseñado, que las mujeres competimos, nos envidiamos y no podemos trabajar juntas, simplemente es mentira”.

jueves, 21 de febrero de 2019


“DENUNCIAS DE ABUSO SEXUAL ENTRE PARES Y EN LA ESCUELA, ¿CÓMO CONTENEMOS A LOS CHICOS?”

¿Cómo es el procedimiento cuando la acusación se da en el colegio? Desde los escraches a la educación sexual. Crece Mujer consultó a una especialista.

La escuela es uno de los ámbitos más importantes para niños, niñas y adolescentes. No sólo por la cantidad de horas que pasan allí, sino por su función y por los vínculos que allí construyen. En este marco, no es raro que víctimas de abusos sexuales decidan que sea el colegio el ámbito elegido para contar el delito que sufrieron. Pero ¿cómo es el proceso?, ¿cómo deben actuar las autoridades?, ¿está preparado el sistema educativo para enfrentarse a estas situaciones? Para abordar la temática, Crece Mujer consultó a una docente y psicóloga que trabaja en un departamento de orientación escolar.


En principio, la especialista sostuvo que hay dos procedimientos diferentes, dependiendo de quién sea el acusado, si se trata de una persona del círculo íntimo de la víctima o si es un compañero del colegio, lo cual torna el proceso mucho más complejo.

La psicóloga sostuvo que en el ámbito porteño “hay obligación de todo funcionario público de hacer una presentación ante el organismo correspondiente en caso de tomar conocimiento de una vulneración de derechos de niña, niño o adolescente”. A partir de esto, lo que sucede es que las defensorías toman intervención. Estos organismos se crearon para evitar la judicialización de menores que, además, dejaron de mencionarse como tales y se los comenzó a llamar “sujetos de derecho”. Sin embargo, la fuente consultada aclaró que este circuito no siempre funciona bien y, “en muchos casos, se revictimiza a la víctima”.


“Es importante que haya adultos interviniendo para acompañar todo el proceso porque quien es abusado necesita contención legal y psicológica. El espacio psicológico es fundamental”, aseguró la docente. En ese sentido, explicó que la derivación psicológica sigue siendo uno de los puntos complicados, ya que los lugares estatales para esta especialidad en la Ciudad están colapsados.

“El tema de la prioridad de turnos sigue faltando, igual que la cantidad de profesionales en espacios públicos para trabajar con esto, sin entrar en las dificultades de que a veces hay profesionales que no trabajan con perspectiva de género”, añadió.

En este marco, uno de los puntos álgidos es el abordaje con los alumnos. La especialista recomendó “hacer un trabajo fuerte con los estudiantes, porque hay factores comunes, hay regularidades que son el silenciamiento, la vergüenza y la culpa”. Al mismo tiempo, resaltó “la importancia de hablar de eso, de tener gente que acompañe y el espacio terapéutico”.


En tanto, cuando el señalado es otro alumno del colegio, los protocolos son diferentes. La docente mencionó que “en situaciones donde haya estudiantes acusados es delicado y se está discutiendo”. Para ella, “se debe sugerir el tratamiento de un espacio de género y el compromiso por parte de la escuela de armar acuerdos donde no se crucen chicos y chicas, pero eso depende de cada escuela”. Además, detalló que el tratamiento del tema es distinto dependiendo de cómo lo informe la víctima. “Hay diferencias según cómo lo diga la estudiante, si lo cuenta en una asamblea del centro de estudiantes, si lo cuentan las amigas o si hay un escrache. Todo eso implica abordajes diferentes”, dijo.

Los escraches en redes sociales, por ejemplo, se dispararon luego de la denuncia de Thelma Fardín contra Juan Darthés. Es un fenómeno reciente que genera opiniones contrapuestas, en el caso de los adolescentes, al no mediar terceros o adultos, es posible que la situación se desborde por falta de educación en el uso de redes (sobreexposición, condena social, opiniones de desconocidos que pueden perjudicar).


Finalmente, aquí aparece reflejada una vez más lo imprescindible y urgente de la educación sexual, “que haya herramientas a disposición para los adultos y los estudiantes”. En ese sentido, la psicóloga aclaró: “Hay veces que hay información, pero si desde el lugar de quienes tienen responsabilidad de adultos la ejecutan con frialdad mecánica y judicial, profundizan la violencia ya ejercida. No se trata meramente de información o aplicación de protocolos sino de cuidado, respeto, ternura, acompañamiento más en esa clave”.

¿Cómo es posible esto? Según ella, “a partir de pensar la ESI no sólo como contenidos fríos sino en lo que hace a los modos de relación que habitamos en estos tiempos. Una clave es trabajar qué ofrece la cultura o qué hace el neoliberalismo con los cuerpos y qué decisiones podemos empezar a construir en torno a eso, el armado de relaciones menos hostiles, de relaciones de cuidado, en una clave completamente distinta a la que se propone en estos tiempos”.

martes, 19 de febrero de 2019


“MAFALDA RELOADED: LAS MEJORES VIÑETAS FEMINISTAS DEL PERSONAJE MÁS AMADO DE QUINO”

Con prólogo de Patricia Kolesnicov, Ediciones de la For lanzó “Mafalda: femenino singular”, un cuaderno rojo con el recorrido feminista del mítico personaje de historieta. Puro humor de actualidad.

"¡Pero cómo Mafalda no va a hablar de las mujeres! ¿Cómo no va a ver que ella no puede ser presidenta (y Manolito sí), que su mamá no tiene vida -el famoso "qué te gustaría ser si vivieras"- porque trabajo y casa son una misma cosa, que el futuro que se ve a través del rulero empieza en el amor romántico y termina en la cocina?", escribe la periodista y escritora en el prólogo de Mafalda: femenino singular, el libro que Ediciones de La Flor acaba de lanzar al mercado.


Introduce así a la "personaja" de historieta más famosa, a la niña rebelde con una cabeza más grande que los grandes de su familia (sus papás), de pelos abultados y dedo firme para denunciar las injusticias del mundo. La pobreza mundial no le preocupa a Mafalda más que la esclavitud de su madre aferrada a los electrodomésticos. La descripción del universo que la rodea es tan fina que llega a percibir esa desigualdad evidente en todas las épocas, la de género.


Quino se apropia de ese personaje de clase media y le hace decir todo; es un dibujante aliado del feminismo. Denuncia sin pelos en la lengua los machismos de sus personajes varones: el papá, Felipe, Miguelito.


Introduce así a la "personaja" de historieta más famosa, a la niña rebelde con una cabeza más grande que los grandes de su familia (sus papás), de pelos abultados y dedo firme para denunciar las injusticias del mundo. La pobreza mundial no le preocupa a Mafalda más que la esclavitud de su madre aferrada a los electrodomésticos. La descripción del universo que la rodea es tan fina que llega a percibir esa desigualdad evidente en todas las épocas, la de género.


Quino se apropia de ese personaje de clase media y le hace decir todo; es un dibujante aliado del feminismo. Denuncia sin pelos en la lengua los machismos de sus personajes varones: el papá, Felipe, Miguelito.

jueves, 14 de febrero de 2019


“ADIÓS ESTEREOTIPOS: LA BARBIE INCOMODA QUE ES ESTRELLA EN INSTAGRAM”

Es una creación de la artista sudafricana Annelies Hofmeyr. Con rollos, peluda, fumando o amamantando, ya es un fenómeno viral.

¿Es Barbie sólo la emblemática muñeca rubia, flaca, de piernas interminables y dueña de los estereotipos más polémicos y repudiables? Probablemente sí. Pero la artista sudafricana Annelies Hofmeyr creó una cuenta de Instagram donde muestra el "lado b" del famoso juguete y más de 300 mil seguidores la convirtieron en un fenómeno viral.

“Trophy Wife Barbie” (Barbie esposa trofeo) ofrece detalles de una mujer real. Una Barbie con rollos, celulitis, en el baño, con piernas peludas e incluso amamantando o masturbándose son parte de los posteos.


“El principal objetivo de Hofmeyr con este proyecto es resaltar las limitaciones de las etiquetas y explorar las cuestiones de género y la identidad femenina moderna”, dice la página.

“El trabajo es una invitación a considerar lo que podría suceder si nos centramos en las cosas que tenemos en común, en lugar de temer las cosas que nos hacen diferentes”, añade.

Un elemento que aparece en cada foto son los cuernos. La explicación de la autora es la siguiente: “Son una representación física de una etiqueta que se le impuso, comparándola con un trofeo de caza; algo para ser propiedad”.


Barbie rasurándose las piernas



Barbie masturbándose



Barbie marihuana



Barbie protector diario


martes, 12 de febrero de 2019


“SEGÚN UN ESTUDIO, EL TRABAJO DOMÉSTICO “INVISIBLE” DETERIORA EL BIENESTAR Y LA SALUD MENTAL DE LAS MUJERES”

Un informe publicado en la revista Sex Roles afirma que las mujeres llevan la “carga mental” de las responsabilidades de la casa y eso afecta su salud.

El trabajo doméstico invisible, que va desde organizar los horarios de la familia hasta estar pendientes de las necesidades emocionales de los hijos, sigue recayendo mayoritariamente en las mujeres y eso deteriora tanto su bienestar como su salud mental, afirma un estudio divulgado en el día de hoy.


"Aunque puede que las mujeres estén poniendo menos lavarropas, continúan teniendo la responsabilidad de que el jabón no se termine, de que toda la ropa sucia se lave y siempre haya toallas a la mano", resumió Lucia Ciciolla, profesora asistente de Psicología de la Universidad Estatal de Oklahoma (EE.UU.) y autora del estudio publicado en la revista Sex Roles.

Las mujeres "están empezando a reconocer que todavía mantienen la carga mental del hogar, incluso si otros comparten el trabajo físico, y que esta carga mental puede pasar factura", agregó Ciciolla.

Un grupo de investigadores, de las universidades estatales de Oklahoma y Arizona, entrevistaron a 393 mujeres estadounidenses casadas o comprometidas con hijos menores de 18 años. Más del 70 % de las encuestadas tenía, al menos, educación universitaria.

Para analizar cómo el trabajo doméstico invisible afecta el nivel de satisfacción de las mujeres con sus vidas y sus sentimientos de angustia o vacío, los investigadores establecieron tres grupos de tareas: organizar los horarios de la familia, fomentar el bienestar de los hijos y tomar decisiones financieras importantes.


Casi 9 de cada 10 mujeres respondieron que se sentían las únicas responsables de organizar los horarios de la familia, un porcentaje alto dado que un 65 % de las encuestadas tenían un trabajo fuera de casa, según Suniya Luthar, profesora de Psicología de la Universidad Estatal de Arizona y otra de las autoras del estudio.

Por otro lado, 7 de cada 10 revelaron que también eran responsables de otras áreas de las rutinas familiares, como la asignación de tareas domésticas.

Esa "responsabilidad exclusiva de la administración del hogar mostró vínculos con los niveles de angustia de las madres", explicó Luthar.

La tarea de estar pendientes de las necesidades emocionales de los hijos también recaía casi exclusivamente en dos tercios de las encuestadas y 8 de cada 10 dijeron ser quienes conocían a los maestros de los chicos.


Esa labor invisible de buscar el bienestar de los hijos se vinculó fuertemente con la angustia de las mujeres, con sus sentimientos de vacío y también con bajos niveles de satisfacción con su pareja y con la vida en general, de acuerdo con el estudio.

En el capítulo de responsabilidades compartidas, las encuestadas mencionaron la tarea de inculcar valores a los hijos y la toma de decisiones financieras.

"Necesitamos atender el bienestar de las madres si queremos que a los niños les vaya bien, y también por el propio bien de ellas", subrayó Luthar.

A juicio de Ciciolla, "ser capaces de abordar las desigualdades en el trabajo invisible" puede permitir crear hogares más funcionales y "ahorrar gimnasia mental a las mujeres para que encuentren espacio y tiempo para cuidarse a sí mismas".

jueves, 7 de febrero de 2019


“GUÍA PARA SER UNA ANTIPRINCESA: LITERATURA AL SERVICIO DE NIÑAS REALES”

El nuevo libro de Nadia Fink y Pitu Saá propone desterrar el concepto de espejito, espejito. Un título que apela a querernos tal cual somos y a las libertades de elección.

“Basta de tanto ‘espejito, espejito’. Al final, siempre son los protagonistas de los cuentos… Queremos espejos que nos muestren como somos en realidad: de muchos tamaños y colores, despeinadas, con picaduras de mosquitos, con piojitos en la cabeza, con moños torcidos de tanto hamacarnos y con una sonrisa gigante de gustarnos como somos”. Así comienza Antiespejito. Guía para ser una Antiprincesa (editorial Chirimbote), la nueva propuesta de Nadia Fink y Pitu Saá.


En diálogo con Crece Mujer, la autora sostuvo que en este tipo de cuentos “el potencial que tiene el mensaje es, sobre todo, promover libertades de elección y de deseo. Cuando empezamos a hacer a las Antiprincesas, creíamos que contar la vida y el legado de mujeres fundamentales en nuestra historia latinoamericana les daba a las niñas (y niños) una perspectiva bien diferente de ser mujeres. Contar con perspectiva de género es también dar cuenta de la historia desde otro punto de vista. Notamos que ese mensaje era bien recibido: ser antiprincesa es ser como uno quiera ser”.

Fink detalló que “la guía para ser una Antiprincesa promueve infancias libres y divertidas. Y brinda aportes para que las chicas se quieran tal cual son desde sus primeros años; vestidas con los colores que más les gusten; practicando sus deportes favoritos, sin barreras; y juntas. Propone romper estructuras y desandar todo lo aprendido mediante textos y actividades que harán reflexionar sobre las vestimentas, los colores, los juguetes y juegos que no deberían dividirse según el género; atravesada por algunos de los ejes que plantea la Ley de Educación Sexual Integral (ESI)”. Y añadió: “Y rompe con otro mito en torno a las mujeres: el de la competencia”.


Una vez más, la escritora y el ilustrador se involucran en el mundo de la diversidad y hacen hincapié esta vez en la importancia de querernos tal cual somos. La guía apela a niñes que no esperan ser rescatados por ningún personaje (niñes, sí, porque además apelan al lenguaje inclusivo), sino que van en busca de sus sueños y deseos.

Jugar a lo que tengan ganas -sin responder a mandatos, tradiciones ni prohibiciones-, vestirse del modo que quieran e ignorar aquello del rosa para nenas y celeste para varones es otra de las máximas que pasa por las páginas de la obra.

Más profundo aún: aunque es un libro infantil, aquí se deja claro un concepto que servirá para toda la vida. Las antiprincesas “tienen derecho a decir que no”; la idea de niñas o mujeres obedientes, inhabilitadas a demostrar sus desacuerdos o ideas propias ya no tiene (o no debería tener) lugar en el mundo de hoy.

Fink introduce también conceptos como “sororidad”, desterrando el prejuicio de que “las chicas somos malas entre nosotras”; se refiere a las diferentes orientaciones sexuales y propone “soñar sin miedos” a la hora de pensar en futuras vocaciones.


Sin embargo, en medio de este contexto de conquistas femeninas y deconstrucción, hay quienes aún optan por libros de princesas donde la mujer no es representada como las luchadoras actuales, libres y fuertes. Para la autora, “los cuentos clásicos se siguen eligiendo porque, por un lado, son ancestrales: se cuentan desde hace miles de años. Por otro lado, muchas veces se desestiman los mensajes que nos deja la literatura infantil, muchas personas los siguen viendo como inocentes y que no generan influencia en pensamiento o en acción. Por el contrario, desde Chirimbote creemos que esas ideas de princesas ricas, bondadosas y sumisas van generando conceptos y formas de percibirse y actuar para las niñas y en los niños la percepción que tienen de las mujeres”.

El caso opuesto es el de las “Antiprincesas”, que ganan cada vez más adeptos gracias a los numerosos títulos de Chirimbote, que cobraron una importantísima popularidad entre los chicos. “Con los avances en materia de diversidad, muchas familias desean criar niñas y niños más libres, que puedan tener la posibilidad de jugar con lo que quieran, disfrutar de los colores, vestirse de distintas maneras. La niñez es un lugar donde las posibilidades son muchísimas, como personas adultas que acompañan y no estructuran, hay toda una generación que está dispuesta a criar hijas e hijos libres para elegir y para desear”, concluyó Nadia al explicar su éxito.

martes, 5 de febrero de 2019


“ALFAJORES EN NUEVA ZELANDA: LA EXITOSA PYME DE UNA ARGENTINA Y UN URUGUAYO”

My Alfajores es el emprendimiento que esta pareja realiza con éxito en Queenstown. Conquistaron tanto a los latinos que viven en el lugar como a los locales.

“Traé alfajores”, solemos decir muchas veces cuando alguien se va de vacaciones a ciertos puntos turísticos argentinos. Ahora bien, ¿alguien diría lo mismo cuando el viajero tiene como destino Nueva Zelanda? Ya pueden hacerlo, porque una argentina y un uruguayo llevaron hasta ese lejano país el sabor de esta clásica golosina.

Maika y Yonatan son los responsables de My Alfajores, el emprendimiento conjunto que la pareja lleva a cabo en Queenstown. Vinimos en el año 2016 en busca de oportunidades, al igual que muchos otros latinos. “Nueva Zelanda es un país hermoso y su gente también, pero desde el comienzo, al igual que la mayoría de las personas que se van de su país, se extraña la familia, los amigos, las costumbres y las comidas típicas”, dijeron a Crece Mujer.


Todo surgió de la mano de la mano de sus amigos de origen sudamericano. “Como nos encanta cocinar, hacíamos cosas ricas de nuestros países de origen e invitábamos a nuestros amigos latinos. Si bien disfrutaban de todo, había algo que los dejaba enloquecidos: los alfajores. Nos agradecían por haberlos hecho sentir de vuelta en casa, aunque sea por un ratito”, comentaron.

Así, empezaron a pensar en que el agasajo se convierta en una empresa: “Era la idea perfecta para poder trabajar en los que nos apasiona haciendo feliz a la gente que prueba nuestros productos”.

Podría haber sido dulce de leche, locro, empanadas… pero ellos se decidieron por el alfajor, producto que representa para Maika y Yonatan “un símbolo de hogar”. “Comer un alfajor es como volver a casa y darle un abrazo a tu vieja, como sentarse en la mesa de los domingos con tus abuelos, es el ejemplo perfecto de la tradición y la costumbre exteriorizado en un producto. Por otro lado, es algo sumamente rico que puede ser disfrutado en cualquier momento del día para darse un pequeño gustito”, detalló la pareja.


Al principio, los emprendedores pensaron en clientes latinos residentes en Nueva Zelanda. Pero más tarde advirtieron que el placer que desata un alfajor no conoce de fronteras. “Luego de un tiempo, algunos ‘kiwis’ (así se les llama a las personas nacidas en Nueva Zelanda) empezaron a probar nuestro producto por recomendación de terceros y nos dimos cuenta que les gustaban igual o más que a los latinos. Acá son muy ‘dulceros’ y eso hace que las características del producto se adecúen a su paladar. También nuestra variada oferta hace que las personas encuentren lo que les gusta. Hoy comercializamos "My Black" (alfajores de chocolate negro), "My Snow" (alfajores de chocolate blanco), "My Buttery Coconut" (alfajores de maicena) y "My Cakes" (pasteles elaborados a gusto del consumidor)”, dijeron.

El nombre de la marca nació de las iniciales de sus nombres, pero también de la idea que se proponen: “My”, por Maika y Yonatan. Pero no sólo eso: “Por el otro lado, la palabra ‘my’ en inglés, que significa ‘mío’ o ´mis’ en español, representa el valor principal de nuestros alfajores: 100% hechos a mano, con amor, trabajo duro y pasión. Eso hace que el cliente sienta que el alfajor que compró fue un producto hecho exclusivamente para él, que luego de terminar probando el producto diga: ‘estos son My Alfajores, Mis Alfajores’”.

Actualmente ofrecen cajas de 6 y 12 unidades y los precios van de 12 a 20 dólares. Su objetivo, por ahora, es comercializar 200 alfajores por semana.